CASA 1,2,34












El arquitecto
Ludwig Mies van der Rohe nació el 27 de marzo de 1886 en la ciudad de Aquisgrán (Alemania). Los primeros estudios en los que colaboró fue el de Bruno Paul y posteriormente en el de Peter Berhens. En 1912 abrió el suyo con mucho esfuerzo en Berlín. Entre sus obras más emblemáticas de esta etapa destaca el Seagram Building (1958), un rascacielos de 37 pisos de vidrio y bronce construido en Nueva York junto a su discípulo Philip Johnson.
Mies van der Rohe está considerado uno de los arquitectos mas importantes e influyentes en la arquitectura moderna. Durante toda su trayectoria profesional ha seguido las líneas que sus tan divulgados lemas expresan: «Less is more» («Menos es más») y «God is in the details» («Dios está en los detalles»).

Sus apartamentos en la colonia Weissenhof son de gran interés dentro de esta.

“ Nuestra tarea esencial es liberar a la práctica de la arquitectura del control que ejercen sobre ella todas las prácticas estéticas y restaurarlo a lo que debería exclusivamente ser: una vivienda” - Mies Van der Rohe

En los apartamentos de Weissenhof, Mies prestó gran atención a la luz, la circulación de aire y demás aspectos que hiciesen de esta vivienda un cómodo lugar para vivir.
El solar, el de mayor longitud de la colonia, se encontraba situado en un óptimo lugar para aplicar técnicas de acondicionamiento pasivas. Además, Mies se aseguró de desplazar el solar ligeramente al oeste para que toda la fachada principal tuviese orientación sur y se asegurase la entrada de luz solar por los huecos durante todo el día. También se aseguro de que los árboles que crecían alrededor no bloqueasen en ningún momento esta entrada de luz en la vivienda.
El tipo de construcción, tipo “esqueleto” de acero, dotaba a la vivienda de la independencia de espacios en planta que tanto caracterizaba a las viviendas de la colonia. Esta idea se desarrollo con variables y cada arquitecto la trataba con su más puro estilo personal . Mies van der Rohe lo representó con particiones desmontables, que daban más libertad a la familia para realizar cambios en el apartamento .






Mies describió su idea aplicada en los apartamentos en Weissenhof del siguiente modo:

“Las consideraciones económicas de hoy en día, en el campo de las viviendas de alquiler, requieren una estandarización de la producción. El constante crecimiento en la diversidad de necesidades dentro de una casa, por otro lado, demanda una gran flexibilidad en el uso de las estancias. La construcción tipo “esqueleto” es la más apropiada en este caso. Permite un proceso de producción racional y ofrece la posibilidad de realizar cualquier posible variación en la distribución interior. Si el arquitecto se limita a si mismo que la cocina y el baño deben estar continuos en la vivienda debido a las instalaciones de agua, mientras que reparte los espacios de descanso y convivencia con paredes movibles, es posible satisfacer cada necesidad en la vivienda”
La forma de la estructura escondida bajo una sucesión de cambios en paralelo, cubos continuos llevados a la mínima simplificación, un edificio ancho rectilíneo con ventanas hábilmente colocadas y casi totalmente alineadas entre sí en la fachada.

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